Hoy te voy a enseñar cómo formatear una unidad USB a FAT32 sin importar el tamaño que tenga… y lo mejor de todo: sin usar ningún programa externo. Solo vamos a usar las herramientas que vienen por defecto en Windows. Así que si alguna vez te ha pasado que al intentar formatear un USB grande no te aparece la opción de FAT32, quédate porque este truco te va a salvar.
Formatear USB Fat32 paso a paso
Resulta que Windows, por defecto, no te permite formatear en FAT32 si la unidad tiene más de 32 GB. Por ejemplo, yo tengo aquí conectada una memoria USB de 64 GB. Cuando hago clic derecho y le doy a “Formatear”, verás que solo me deja NTFS como opción. FAT32 ni aparece. ¿Por qué? Porque simplemente Windows impone esa limitación arbitraria, aunque técnicamente sí es posible.
Pero tranquilos, que esto tiene solución y además es muy sencilla. Solo tienes que hacer lo siguiente:
- Haz clic derecho sobre el botón de Windows y selecciona “Administración de discos”. Esperamos unos segundos a que se cargue la lista de unidades y verás tu USB ahí, perfectamente reconocible por su tamaño
- Lo primero que vamos a hacer es eliminar el volumen de esa unidad. Esto liberará todo el espacio, dejándolo como “no asignado”.
- Una vez hecho esto, vamos a crear un nuevo volumen simple, pero aquí viene el truco: el tamaño que le asignemos debe ser menor a 32 GB. En mi caso, voy a elegir 30 GB, pero tú puedes poner el número que quieras siempre que no supere ese límite. Esto es fundamental para que FAT32 aparezca como opción.
- Si estás Después asignamos una letra de unidad, la que Windows nos sugiera está bien, y ahora sí, llegamos a la parte clave: elegimos formatear en FAT32. Como ahora el volumen es menor a 32 GB, el sistema ya no pone ninguna pega. Pulsamos “Siguiente”, luego “Finalizar”, y en cuestión de segundos, el proceso termina.
- Y listo. Ya tienes tu USB formateado en FAT32.
Pero espera, que aún nos queda el espacio que no asignamos antes. Ese almacenamiento restante sigue ahí, y podemos aprovecharlo. Volvemos al mismo proceso:
- Creamos otro volumen simple que en mi caso será con el tamaño restante del disco duro
- Le damos un nombre
- Le asignamos una letra
- Seleccionamos NTFS ya que el tamaño es de más de 32 GB… y ¡voilà! Segunda partición lista y funcionando.
Este truco también te sirve si tienes una memoria de 128 GB o más. Puedes crear varias particiones menores de 32 GB y formatearlas todas en FAT32 o hacer como yo. Es práctico, rápido y sobre todo, te evita tener que instalar programas de terceros.
En mi caso voy a renombrar las particiones que es algo que podría haber hecho antes pero se me ha pasado.
Así que ya ves, en menos de 5 minutos puedes tener tu unidad USB lista en FAT32, compatible con todo tipo de dispositivos: consolas, televisores, reproductores, y sistemas antiguos.
Ya ves que cambiar el formato de tu USB no es nada complicado cuando sabes qué hacer. ¿Tenías ese problema y lo resolviste? Cuéntamelo abajo. Y si te interesan más soluciones prácticas como esta, este canal está hecho para ti. ¡Nos vemos en el siguiente!
¡Hola Lector/a! Si estás aquí es porque buscas información acerca de cómo conectar alguno de tus dispositivos . Espero que mi web sea de ayuda y si necesitas algo, contáctame por mail 🙂
